domingo, 2 de septiembre de 2007

LO DE MENOS, ES EL KILOMETRAJE...

esiropajo@gmail.com


No se porquè, siempre se me ha hecho difìcil decir mi edad. Viene a cuento, porque recientemente, el 29 de Agosto pasado, fue mi cumpleaños. Recuerdo que mi primer sentimiento de molestia; de complejo quizàs, lo sentì cuando estaba a punto de cumplir 26 años. Parece increìble èsto, pero asi fuè. Todo se iniciò cuando a una compañera de trabajo, que celebraba el suyo en Julio, le preguntè...Miriam y cuantos cumples? y me respondiò: 24. En ese instante fue como si algo desagradable recorriera mi espalda, y me sentì vieja...¡Horror!.Han pasado los años y siempre he encontrado motivos, excusas, para ocultar este asunto, para soslayar la respuesta cuando me preguntan directamente y, a veces, hasta para contestar no muy amablemente...como por ejemplo..¡que!..¿me vas a querer màs si te lo digo?. Esto llegò a un punto que un dìa pensè: si soy tan poco dada a las mentiras, ¿porquè lo voy a hacer con algo tan tonto?...entonces, tomè el atajo de decir directamente - si la gente era de confianza - NO TE IMPORTA; si no lo era, la verdad: no me gusta decir mi edad.... Cosa curiosa; hasta hace muy poco tiempo, cada vez que àlguien sabìa mis años o se me ocurrìa decir cuantos eran, siempre, sin excepciòn me celebraban..¡que joven te ves!...sin embargo,ni eso me animò; seguì sintiendo como un nudo en la garganta con la tal preguntita.




Los seres humanos somos incomprensibles; para los demàs, y sobre todo, para uno mismo . Por eso se dice que tardamos DEMASIADO en conocernos realmente, si es que algùna vez lo hacemos. No es compatible con mi caràcter, con mi personalidad, con la seguridad que he demostrado siempre, a travès de miles de situaciones complicadas , semejante ´´flaqueza´´ con los años. He tomado decisiones difìciles, duras, durìsimas podrìa decir, a edades tempranas, donde muchas personas quizàs, no las tomen jamàs. He sido una luchadora, una guerrera - como dirìa mi hija . He estado sola casi la mayor parte de mi vida, enfrentando lo que hubiera que enfrentar, sin temores; sin sentirme jamàs menos que nadie. Peleando a brazo partido a veces, en lo que tradicionalmente se llama ´´un mundo de hombres´´, especialmente en cuestiones de trabajo. Sin embargo, entre otros Talones de Aquiles que seguramente tengo por ahì escondidos, ese ha sido uno al que apenas estoy comenzando a vencer. Cada vez se me hace màs facil decir: acabo de cumplir vierundsechzig aber swei años...oh por Dios, espero que esto no llegue a oìdos de nadie. Y... ¿ se escribirà asi en alemàn?....



NOS QUEDAREMOS CON UNA EXPRESIÒN, QUE AL MENOS NOS CONSUELA MUCHO


EL CORAZON NO ENVEJECE